sábado, 4 de septiembre de 2010

OTRA SEPARADA MAS

Hoy llegué a lo que en adelante será mi hogar. No lo parece para nada, viniendo de una preciosa, en condominio, con todas las comodidades y mis cosas, que harto trabajo me costaron. Ahora mi hogar consiste en una cama hechiza en un dormitorio de a lo mas 5 metros cuadrados, con "acceso" a baño, wifi y 3 comidas al día. Ya no está la posibilidad de ir a abrir una botella de bebida a medianoche, o estirar la mano para sacar una leche asada.
Aun me pregunto como paso todo esto tan rapido, no logro ver claramente como ayer fuimos con mi ex (que fuerte es pensarlo y escribirlo, que fea una palabra de apenas 2 letras) y firmamos ante un notario un contrato, o como se llame, de cese de convivencia. Veo todo borroso, tengo nauseas y me duele muchisimo la cabeza, de pena? de rabia? de desilusion? de fracaso?
Lo peor es que cedí tan fácil en dejarle los niños. Quisiera sentir su pelito hediondo a traspiracion, tomar sus manitos con tierra, y que me estuvieran apurando para que les prestara el computador. Pero ahora puedo usarlo todo lo que quiera, a nadie le importa si en este fea pieza estoy durmiendo o llorando.
Voy a tener que dormir siesta un poquito para ver si se me desinchan los ojos, ya que aqui no hay sabanas ni almohada, y voy a tener que ir a comprar, lo mismo que las toallas, que se me quedaron, un cepillo de dientes y shampoo.
No quiero ofender a los universitarios, todo lo contrario, como pueden vivir en una pension, y que no les duela?